A helpless victim of a spider's web And I'm an insect ¿Sabes con que te quedas al final del día? Con una mañana de bilis, una tarde con lagrimas camufladas y, al final, con 5 minutos de abrazos que sabes que no van a durar nada. Porque si a un niño le dices te quiero un millón de veces, te puede repetir las mismas palabras, pero no significa que las sienta. Y con ese método puedo decir "te extraño", "perdóname" y "nunca más". Y esos serán siempre tus 5 minutos. Y no me molesta, por naturalidad, ese tipo de cosas. No me molesta, incluso, que me des la espalda solo para vivir esos 5 minutos. Siempre he sabido que para ti soy solo un libro abierto que tiene a veces las respuestas correctas y 2.50 soles en el bolsillo; un reemplazo triston de algún otro payaso. Me molesta haberme creído que yo no me hacia el loco contigo sabiendo que eras así, que solo eran cosas mías; en una cabeza cada día ...